El encanto del Raval…
Como seguro que se habrá notado por el poco movimiento que hay en el blog, últimamente me cuesta sentarme delante del ordenador a escribir. No sé si es el calor, las ganas de estar en la calle en una terraza con los amigos (por la noche, por supuesto, antes, imposible!), la ñoña esa que entra […]